Agrupacion profesional de subalternos xunta de galicia
Galicia lodomeria
El Reino de Galicia (gallego: Reino de Galicia, o Galiza; español: Reino de Galicia; Portugués: Reino da Galiza; Latín: Galliciense Regnum) fue una entidad política situada en el suroeste de Europa, que en su cenit territorial ocupó todo el noroeste de la Península Ibérica. Fue fundado por el rey suevo Hermerico en 409, con capital en Braga[2], y fue el primer reino que adoptó oficialmente el catolicismo. En 449, acuñó su propia moneda. En 585, pasó a formar parte del reino visigodo. En el siglo VIII, Galicia pasó a formar parte del recién fundado Reino cristiano de Asturias, que más tarde se convertiría en el Reino de León, al tiempo que alcanzaba ocasionalmente la independencia bajo la autoridad de sus propios reyes[3] Compostela se convirtió en la capital de Galicia en el siglo XI, mientras que la independencia de Portugal (1128) determinó su límite meridional. El acceso del rey castellano Fernando III al reino leonés en 1230 puso a Galicia bajo el control de la Corona de Castilla.
Galicia--volhynia
El Reino de Galicia (gallego: Reino de Galicia, o Galiza; español: Reino de Galicia; portugués: Reino da Galiza; Latín: Galliciense Regnum) fue una entidad política situada en el suroeste de Europa, que en su cenit territorial ocupó todo el noroeste de la Península Ibérica. Fue fundado por el rey suevo Hermerico en 409, con capital en Braga[2], y fue el primer reino que adoptó oficialmente el catolicismo. En 449, acuñó su propia moneda. En 585, pasó a formar parte del reino visigodo. En el siglo VIII, Galicia pasó a formar parte del recién fundado Reino cristiano de Asturias, que más tarde se convertiría en el Reino de León, al tiempo que alcanzaba ocasionalmente la independencia bajo la autoridad de sus propios reyes[3] Compostela se convirtió en la capital de Galicia en el siglo XI, mientras que la independencia de Portugal (1128) determinó su límite meridional. El acceso del rey castellano Fernando III al reino leonés en 1230 puso a Galicia bajo el control de la Corona de Castilla.
Corona de castilla
Este capítulo examina cómo el Estado español y dos comunidades autónomas (la Comunidad Autónoma Vasca y Galicia) han abordado la diversidad lingüística, religiosa y artística. La primera sección ofrece una visión general de la constitución de las comunidades autónomas y de las políticas de inmigración. En los siguientes subapartados se analizan las formas en que las distintas fuentes de diversidad lingüística, religiosa y artística han sido incluidas y excluidas de las "políticas de normalización", es decir, las políticas dirigidas al reconocimiento y apoyo de la diversidad cultural, a nivel estatal y autonómico. El énfasis de las políticas culturales en las formas territoriales de la diversidad cultural y en la diferencia cultural, así como el énfasis de las políticas de inmigración en la integración social de los inmigrantes, normalmente sin tener en cuenta sus derechos culturales, han reificado las fronteras simbólicas entre culturas y grupos sociales, impidiendo el desarrollo de la interacción social y la hibridación cultural entre los diferentes grupos sociales.
Reino de león
Una de las consecuencias más perniciosas del colonialismo fue lo que K. C. Bhattacharya describió como la "esclavización de las mentes". Produjo un sentimiento de inferioridad, un borrado de la memoria y las culturas, un vocabulario conceptual ajeno y una perspectiva hegemónica desde la que ver el mundo. Este artículo describe estas consecuencias con cierto detalle para demostrar los enormes retos conceptuales a los que debe enfrentarse una descolonización de la mente en su intento de hacer avanzar la sociedad, y el discurso público, hacia un futuro verdaderamente emancipador. Además de estos retos conceptuales, el artículo también describe la nueva y preocupante recolonización de la mente india que está teniendo lugar por parte de las agencias productoras de conocimiento que están fuera de la universidad y que están impulsadas por los intereses del capital global en su implacable deseo de dominación. Estas agencias del conocimiento producen un discurso basado en el interés y, en una grave desviación, desvinculado de la búsqueda de la verdad.
1 En la conferencia Sir Ashutosh Memorial titulada "Swaraj in Ideas", pronunciada en 1931, el eminente filósofo indio K. C. Bhattacharya lamentaba el impacto que había tenido en la India el encuentro colonial con Europa. Dos consecuencias le preocupaban profundamente. A la primera se refería como la esclavitud de la mente, que, en su opinión, era peor que la sujeción política, ya que esta última sólo suponía una restricción en la "vida exterior del pueblo", mientras que en el caso de la esclavitud de la mente "la esclavitud comienza cuando uno deja de sentir el mal y se profundiza cuando el mal se acepta como un bien". La segunda consecuencia perjudicial para él era la sustitución de la mente real por la mente en la sombra "que funciona como una mente real excepto en la forma de creatividad genuina" (Bhattacharya, 1954: 2-4).